martes, 4 de febrero de 2014

Ilusión- ¡No dejes de soñar!

Ayer tuve la oportunidad de presenciar una entrevista muy interesante a un doctor que más allá de su visión como médico de UCI, relató sus experiencias fuera del Hospital, centrándose en el que es su hobby: la escalada.

Ha coronado los picos más altos del mundo, y lejos de considerarse un gran deportista o una persona físicamente muy preparada, dice que el alpinismo poco tiene que ver con el deporte.

Puso el trabajo muy fácil a las periodistas, porque supo enlazar su vida social y profesional de manera elegante y con uso de la palabra exquisito.

Sonreí cuando dijo que él creía que eso de compartimentar conocimientos estaba bien para especializarse, pero que él no creía que un médico no tuviera que ser un ignorante de las letras, ni un periodista de las ciencias. Tenía razón.

Cuando le preguntaron en su vida, una palabra o un valor por el cuál regir sus pasos, contestó que para él lo más importante era la ilusión: "no dejar de soñar". Insistió en que siempre hay que luchar y ponerse retos. "La ausencia de sueños es esa enfermedad llamada depresión".

Hoy, las circunstancias, de nuevo, han hecho que sienta que una ilusión se me ha apagado. Me acosté triste y decepcionada porque puse "mi ilusión" en algo o en alguien que parece que no compartía esa misma ilusión.

Sin embargo, he despertado acordándome de las palabras de ayer de este doctor, y al rememorarlas no he podido evitar animarme.

Mentiría si dijese que ahora mismo me siento pletórica, pero he de pensar que tengo muchas otras ilusiones que probablemente sean mucho más importantes. Es por eso, que aunque se que hoy el día será un poco más gris de lo que lo había planeado, esta noche, al volver a la cama, soñaré seguro con todos esos proyectos que me harán ilusionarme en el futuro.

Me siento afortunada por tener la suerte de poder aplicar cosas tan interesantes que me está aportando mi trabajo a mi vida personal. ¿Quién da más?

Buenos días.

Quote ♥

Cuando crezcas, descubrirás que ya defendiste mentiras, te engañaste a ti mismo o sufriste por tonterías. Si eres un buen guerrero, no te culparás por ello, pero tampoco dejarás que tus errores se repitan.